La utilización de cookies que Facebook instala en los equipos de los internautas ha comportado acusaciones provenientes de la Agencia de Privacidad Belga.

Hace unos días la Vanguardia publicaba una noticia relacionada con un informe elaborado por la Agencia de Privacidad Belga, que revelaba la instalación de cookies que Facebook implantaba a los internautas que consultan páginas web con el dominio de Facebook.com, incluidas aquellas que son abiertas al público.

La cookie que utiliza, conocida como “datr.”, se instala en el disco duro del usuario e informa a Facebook sobre las páginas visitadas. Estas páginas tienen el botón ‘me gusta’ incorporado, y según los autores del informe, aunque el internauta no haya apretado dicho botón o no tenga activado un perfil en la red social, Facebook lo rastrea igualmente.

Este estudio fue encargado después de que la red social fuera acusada de “violar” la ley de protección de datos de la Unión Europea, a pesar de la actualización de su política en enero de este año.

Los investigadores aseguran que las normas de privacidad de la plataforma “no cumplen los requisitos” de la ley europea, más concretamente, del artículo 5 (3) de la Directiva de la UE sobre privacidad y comunicaciones electrónicas, donde queda clara la necesidad de obtener el consentimiento previo de los usuarios, antes de llevar a cabo el rastreo de su dispositivo.

En respuesta a esta acusación, Facebook asegura que la información del estudio es incorrecta: “Virtualmente todas las páginas web, incluida Facebook, usan legalmente cookies para ofrecer servicios. (…) Si la gente quiere dejar de recibir publicidad basada en las páginas que visitan, pueden hacerlo a través del (acuerdo) EDAA» -pactado entre más de 100 compañías y la Unión Europea–, afirma la empresa. Además, dice sentirse “decepcionada con la opinión de la Agencia de Protección de Datos Belga (…) que se ha negado a reunirse con nosotros o a clarificar la información incorrecta sobre este y otros asuntos”.

Asimismo, el informe de la Agencia de Privacidad Belga también revela que los términos de contratación del servicio que ofrece el portal Facebook incluyen cláusulas abusivas que incumplen los derechos del consumidor regulados en la Ley Europea.